Flagrante econocidio en San Luis Potosí

Mario Martínez Ramos*

Pluma No. 6 - Primavera 2007

Uno de los principales ecocidios en México se encuentra latente en el Cerro de San Pedro, municipio del estado de San Luis Potosí, ubicado a 12 kilómetros de la capital del estado. Sobre él yace la amenaza de la empresa canadiense Minera San Xavier. Bien vale la pena conocer la historia del poblado sanpetrense para poder comprender la gran problemática que está padeciendo.

Sede emblemática de la historia de la minería en México
Durante la época colonial, en la Nueva España, la principal actividad económica era la minería. Tomando en cuenta esto, resulta lógico que los asentamientos humanos que se produjeron giraran en torno a la actividad minera. El 4 de marzo de 1592 llegan al Cerro de San Pedro, desde Mexquitic (municipio de San Luis Potosí), los españoles fray Francisco Franco y el capitán Miguel Caldera.

Para cuando los españoles llegaron, los habitantes eran los huachichiles, quienes conocían la riqueza con que contaba su asentamiento. Siendo más precisos, sabían que existía un metal brillante que los conquistadores anhelaban. De esta manera, aquellos "grandes" conquistadores, luego de someter a los originarios bajo la forma de congregación, empezaron a desarrollar la minería.

Sin embargo, la escasez de agua en el Cerro, obligó a ir en busca del vital líquido en los valles cercanos. Es por esto que una vez descubierto el mineral del Cerro de San Pedro, en poco tiempo se comenzaron a poblar cerca de este lugar las congregaciones de Cuesta de Campa, Portezuelo, La Zapatilla, Jesús María, Calderón Monte Caldera, San Francisco de Pozos (ahora Pozos), Divisaderos, etc. Así fue como se gestó el origen de lo que hoy es la ciudad de San Luis Potosí.

Un cuestionable revivir minero
En 1995 llegó al Cerro de San Pedro la empresa canadiense Metallica Resources Inc., que opera aquí bajo el nombre de Minera San Xavier (MSX), con la pretensión de llevar a cabo un proyecto metalúrgico de explotación de minerales con contenido de oro y plata. Esto, en principio, no parecería extraño, dado que el lugar se fundó como centro minero en 1592. El problema surgió cuando la empresa reunió a los pobladores del lugar y les explicó en qué consistía dicho proyecto minero. Veamos.

El proyecto que MSX pretende llevar a cabo, es por el sistema de tajo a cielo abierto (es decir, literalmente se va cavando un enorme hoyo) y el beneficio o extracción de los contenidos de oro y plata, por el método de lixiviación(1) a base de cianuro de sodio.

De acuerdo con el proyecto de la transnacional, se utilizarán 25 toneladas diarias de explosivos, lo cual provocaría un tumbe de cerro del orden de las 80 mil toneladas de material, el cual pasaría por un proceso de trituración. Así, un 40% de este material sería transportado y depositado en el patio de lixiviación, en el cual se aplicarían diariamente por aspersión (rocío) una nociva mezcla de 16 toneladas de cianuro de sodio diluido en 32 millones de litros de agua; esta mezcla lixivia (extrae) los valores metálicos. Hasta aquí el resumen técnico.

Un obsceno y siniestro cocktail para la gente de SLP
El proyecto implica la desaparición, a base de explosivos, de un kilómetro de montañas. Arrasadas estas, se seguiría hacia el subsuelo y al final quedaría un cráter de un kilómetro de diámetro por unos 300 metros de profundidad. Aun así, la problemática no se detiene en la pulverización del histórico y bello poblado(2) que dio origen a la ciudad de San Luis, incrustándose el cerro como emblema del Escudo de Armas del estado. El problema principal tiene que ver con lo que significa el hecho de que la ciudad capital y su zona conurbada (con una población de aproximadamente millón y medio de habitantes) se encuentre a 8 kilómetros de la zona de extracción y lixiviación.

Los vientos dominantes soplan de oriente a poniente, es decir, desde la zona donde se desarrolla el proyecto hacia la ciudad. Es decir, las toneladas de polvillo (generadas por el tumbe de material y su trituración) mezcladas con los gases que producen los explosivos a base de nitrato de amonio, diesel y trinitrotolueno (TNT) se convertirían en un flujo que se depositaría cotidianamente en la urbe. Y esto no es todo.

En palabras de la MSX (en su maquillado Manifiesto de Impacto Ambiental), por lo menos el 25% de la mezcla de cianuro de sodio y agua, que se convertirá posteriormente en el altamente tóxico cianuro de hidrógeno (también conocido como ácido cianhídrico o HCN), se evaporaría al reaccionar con el mineral; otro factor de evaporación sería la temperatura ambiente. Dicho de otra forma, estamos hablando de que por lo menos 8 millones de litros de agua diarios se convertirían en nubes fuertemente impregnadas de ácido cianhídrico que viajarían hacia la ciudad por efecto de los vientos dominantes ya mencionados.

Así, millón y medio de personas estaríamos aspirando continuamente una letal atmósfera saturada de polvillo, gases y ácido cianhídrico, propia de las películas de ciencia ficción que hablan de un apocalíptico y tóxico futuro para la raza humana. Aquí, el futuro nos estaría alcanzando.

Por si fuera poco, la MSX también declara con despreocupado cinismo que el proyecto ocasionará contaminación del manto acuífero. Esto significa que además del saqueo irracional del que podría ser objeto el acuífero (ya de por sí sobreexplotado) estará la contaminación del mismo acuífero, el cual es la fuente de abastecimiento de más del 40% de la población del estado, obteniéndose así un obsceno círculo vicioso.

Los estudios de la Comisión Nacional del Agua(3) detectan que la recarga del acuífero apenas llega a la mitad de su extracción. No olvidemos que San Luis Potosí es una ciudad donde cientos de colonias carecen del vital líquido. Por lo anterior, es fácil advertir que los ataques al medio ambiente y a la salud, causados por el proyecto, serían de proporciones pornográficamente gangsteriles. Este tipo de minería, a cielo abierto y por lixiviación, independientemente de su ubicación en el globo terráqueo, tiene fuertes efectos contaminantes a nivel global, por algo se le conoce como la actividad más contaminante del mundo (4). Estos efectos resultan tanto más depredadores cuando tomamos en cuenta que el 50% de las nuevas minas de oro en el mundo ocupan tierras vírgenes. Entre otros impactos, también tenemos que este tipo de actividad minera:

  • Aporta el 96% de la emisión global de arsénico.
  • Convierte las aguas subterráneas en mil veces más ácidas que una batería.
  • Las empresas resultan implicadas en violaciones a los derechos humanos.
  • En promedio arrojan 79 toneladas de desechos por cada 28 grs. de oro.
  • Emplea solo el 0,09% de la fuerza laboral en el mundo.
  • Consume hasta el 10 % de la energía disponible en el planeta.
  • Deja enormes cráteres en áreas naturales generalmente protegidas. (5)

Las amargas experiencias que han dejado este tipo de proyectos en otros países han obligado a varios gobiernos (sobre todo del primer mundo) a reprimirlos y/o prohibirlos. En contraste, países en vías de desarrollo, como lo es México, son vulnerables a estos proyectos puesto que, al pertenecer a tratados internacionales, se ven obligados a recibir a las trasnacionales bajo la promesa-chantaje de un supuesto desarrollo industrial. Esta situación se agrava por la corrupción de autoridades de gobierno, que en nuestro país y en nuestro estado sigue operando con el más genuino candor juvenil.

La pícara justicia mexicana
La lucha jurídica, en los tribunales superiores de México, nos dan la razón al pueblo. Por ejemplo, se ha logrado que el Noveno Tribunal del Primer Circuito ordenara a la Sala Superior de Justicia Fiscal y Administrativa la anulación del proyecto de MSX por encontrar que era violatorio. La resolución no fue para efectos6, sino lisa y llana. Esto, desde el punto de vista legal, debería haber solucionado el conflicto. Sin embargo, la SEMARNAT (institución supuesta-mente creada, por necesidad social, para defender nuestro ya de por sí deteriorado medio ambiente) da un espectacular giro de 180 grados y se convierte en abogada de los agresores ambientales. Esta Secretaría concedió en forma irresponsable y criminal otro permiso de operación que, de la manera más pícara, contenía las mismas causales de violación que el anterior, además de otras nuevas.

Este "nuevo permiso", totalmente ilegal desde cualquier punto de vista, fue impugnado y está por resolverse en el mismo tribunal que anuló el anterior, anulación que fue desacatada por la mencionada SEMARNAT. Insistimos: desde el punto de vista jurídico es imposible que la resolución sea emitida a favor de la transnacional MSX... sin embargo, los intereses y compromisos políticos son capaces de producir los más inverosímiles malabares y piruetas jurídicos.

Un ejemplo concreto de esta situación, está en el ámbito agrario. Pobladores identificados como el grupo de choque de la Minera San Xavier, celebraron con esta, un contrato de arrendamiento por 290 hectáreas de ejido... ¡sin ser ejidatarios! Los verdaderos ejidatarios interpusieron una demanda agraria y, como era natural, el Tribunal Unitario Agrario declaró inexistente el contrato. Los abogados de la empresa, como era de esperarse, se inconforman mediante un amparo directo. Así, el Tribunal Colegiado, que conoció del caso, declara también nulo el contrato. La empresa, por segunda vez, interpone otro recurso y, el mismo Tribunal Colegiado, ratifica por segunda vez la sentencia. La empresa interpone nuevamente otro recurso, y (adivinen) cae al mismo Tribunal Colegiado. Pero en esta ocasión, después de haber conocido por dos ocasiones el caso, lo tarda 8 meses y se retracta de las dos resoluciones anteriores y falla en contra de los ejidatarios alegando incapacidad procesal.

Lo insólito de este caso, es que, como en la época de la Conquista, llega un grupo de extranjeros que, para poder saquear nuestras riquezas minerales, invaden ejidos, desalojan a sus propietarios, ¡los demandan penalmente por meterse en sus propias tierras!... y los Tribunales les dan la razón. Desde luego que todos estos actos ilegales y de prepotencia no podrían ser si no es con la complicidad de los tres niveles de gobierno y el poder judicial.

Cabe añadir que Cerro de San Pedro goza de protección especial por diferentes decretos. Uno de ellos lo clasifica como zona de preservación de flora y fauna con una política de restauración de la vida silvestre. El otro es una enmienda de la UNESCO de 1993 que lo protege como zona de monumentos. Sin embargo, resulta visible que de nada valen los decretos, menos aún cuando el gobernador del estado, el panista Marcelo de los Santos, es el mayor impulsor del proyecto. Cuando a este personaje se le cuestiona sobre el proyecto de la MSX, contesta que es asunto federal y que está en manos del poder judicial.

Mientras tanto, sin permisos, MSX sigue llevando a cabo trabajos de preparación del sitio, al tiempo que declara que no tardará mucho en iniciar operaciones de lixiviación, con el uso del cianuro de sodio. Asimismo, la Minera, recién afirmó que ya tiene mil quinientos barrenos listos para detonarse y que la SEDENA ya le otorgó los permisos de uso y compra de explosivos. Esto, como decíamos, violando decretos y leyes.

Estos son algunos de los graves impactos ecológicos e históricos que justifican la oposición al citado proyecto, a los que se podrían agregar los sociales. En cuanto a este último aspecto, la empresa ha estado dividiendo a la población y provocando enfrentamientos mediante un bien organizado grupo de choque.

En muchos de los actos de resistencia de la sociedad civil y otras organizaciones no gubernamentales, se ha evidenciado la existencia de un grupo de choque. Una de las represalias mas sonadas fueron las que recayeron sobre dos individuos, que repartiendo volantes e información sobre el proyecto minero, fueron golpeados y rociados con gas pimienta. Otro caso más tumultuario fue en un campamento frente a las instalaciones de la compañía minera, donde a mitad de la madrugada llegó un grupo de camionetas con logotipos de la empresa; las camionetas llevaban a bordo un gran número de personas con chalecos y armados con tubos, agredieron a las personas presentes y a su retirada dañaron vehículos particulares, rompiendo cristales y dañando la hojalatería.

El control político de la MSX
La empresa, desde su llegada, mantiene el control político del municipio y de dependencias estatales y federales además de bancadas en el Congreso local así como al propio poder judicial. Su influencia no tiene límites: el mismo ex presidente Vicente Fox tomó parte en amenazas al ex presidente municipal Oscar Loredo Loredo, para obligarlo a conceder el ilegal permiso. Este individuo, inesperadamente declaró, ante diversos medios locales, que fue "presionado" para otorgar el permiso municipal de "Cambio de uso de suelo, construcción y anuencia de uso de explosivos". Esta situación y una serie de desacatos por parte de secretarios de Estado a resoluciones de los Tribunales, fue denunciada incluso ante el Congreso de la Unión.

En lo relativo a violaciones a los derechos humanos, su magnitud desde hace años rebasó fronteras, al grado de que la asociación multirreligiosa canadiense KAIROS (defensora de tales derechos) ha buscado intervenir para la protección de éstas garantías. En varias ocasiones ha visitado el Cerro de San Pedro y está trabajando en Canadá, a nivel parlamento, exigiendo a su gobierno que legisle en el sentido de que haya un control exterior de estas empresas mineras, que no sólo agreden el medio ambiente, sino que se instalan a base de corromper autoridades y, por supuesto, violando los más elementales derechos humanos.

Uno de los grandes grupos opositores a este proyecto minero es el ahora conocido Frente Amplio Opositor a Minera San Xavier (FAO). Este frente está consolidado por un gran número de organizaciones, colectivos, asociaciones civiles y personas en lo individual.

La oposición que ha hecho el FAO es tan fuerte e incorruptible que lo han reconocido organizaciones ambientalistas internacionales. Muchas de las personas que lo conforman han seguido el movimiento desde su principio (hace 12 años aproximadamente) y son de tanta convicción que, aun cuando el gobierno potosino es tan corrupto, no han podido doblegar la intención de sacar a esta transnacional de la región. Estas últimas personas están siendo víctimas de un acoso por parte del gobierno estatal, a casi todos les han fabricado delitos falsos, con el objetivo de detener el activismo social contra esta empresa minera con todo lo que conlleva.

Los días 22 y 23 de octubre de 2006, el FAO llevó a cabo una consulta ciudadana, para que fuera la población la que expresara su aceptación o rechazo a la empresa transnacional. Para la realización del evento se invitó, formalmente y por oficio, como observadores, al gobierno del estado, al Comité Estatal Electoral y a la propia empresa minera, pero ninguno se presentó. Los resultados del muestreo fueron los siguientes:

19.608 votantes de los cuales 19.050 votaron en contra del proyecto minero, es decir, el 97.45%. Este dato demuestra que el proyecto no sólo es inviable social y jurídica-mente, sino que además es ampliamente impopular.

Y así, como parte de esta barbarie, en San Luis Potosí se cuenta con represión a reporteros, estudiantes, activistas sociales, sindicalistas, académicos, artistas y todo ser vivo que se interponga en contra de los intereses capitalistas más importantes: los económicos.

Si hoy alguien sube al Cerro de San Pedro de noche, podrá ver y escuchar a los vehículos excava-dores en acción. Y conforme pasan los días queda aún más claro que la lucha contra la Minera no es una cuestión de tintes sentimentales sino de supervivencia y dignidad humana. No es posible quedar inmóviles ante la flagrante violación al derecho a vivir.


* Reedición y adaptación por Lilia Ávalos y Pavel Martínez.
(1) La lixiviación consiste en la extracción de minerales con una mezcla de químicos disueltos en agua que van a reaccionar con algunos minerales de las rocas trituradas, separando a los diferentes metales contenidos en las rocas. En este caso la mezcla es con cianuro y zinc.
(2) Desaparecería la cabecera municipal del Cerro de San Pedro, la cual es considerada por la ley Patrimonio Histórico. Además está en trámite ante la UNESCO su reconocimiento como Patrimonio de la humanidad.
Cabe señalar que los gobiernos estatales, tanto los anteriores como el actual, se han negado a firmar el proyecto de decreto para el reconocimiento del Cerro como zona de monumentos históricos, que elaboró para tal fin el gobierno federal, el cual en su artículo primero diría: "Se decreta una zona de monumentos históricos en el poblado de Cerro de San Pedro del Municipio del mismo nombre".
(3) Estudio técnico de las condiciones geohidrológicas y sociales del acuífero 2411 "SAN LUIS POTOSÍ" en el Estado de San Luis Potosí.
(4) Korte, ét al. (2000) Ecotoxicology and Enviromental Safety #46, p. 241-245.
(5) En línea, www.contramina.com/datos.htm, consultado en febrero de 2007.
(6) Esto significa que, jurídicamente, la resolución ya no es impugnable. Es decir, ya es irrefutable.